¿Cómo describirías la situación hoy en día sobre lo que está pasando?
Bueno, a mí lo que me sorprende es que, en principio, el tema Guggenheim, pues fue una apuesta de sí o sí. Y ahora estamos aquí con el Lehendakari Center y digo pues aquí hay un cambio, hay un pequeño giro. No sé si es positivo o es para tomarnos el pelo, para confundir a la población. Eso me deja una duda. Luego hay otra cosa que son detalles concretos en cuanto al hacer el museo. La Vía Verde, Camino Verde de Gernika a Murueta, los accesos a Gernika. ¿Cómo están hoy en día? Pues hay una carretera de hace 100 años, el tren de vía única y un número de personas que hacen una estimación de 140.000 visitantes anuales. Entonces yo no sé esa cifra de dónde la han sacado. Si está calculada al detalle, muy bien. Si está calculada para que por una parte pueda justificar el museo y la construcción, y por otra parte, para que no sea una cifra desorbitada que a la gente le pueda decir "hostias es mucha gente". No vamos a decir que 500.000 vamos a por 140.000. Es el número perfecto, porque si ese número lo calculamos por meses, si fuese cierto, incluso por días, pues nos saldría una cuota de unos 400 turistas diarios. Con 400 turistas diarios, con el precario transporte que hay, incluso se podría asumir. ¿Esta gente cómo va a venir? ¿Van a venir todos en el tren, en autobús, con el bocadillo de tortilla en el bolsillo, como hace esta gente aquí? Y está claro que esto implica muchas más cosas. El museo y la construcción implica, por lo que hemos visto y estamos oyendo casi todos los días, el tema del turismo implica una logística de aparcamientos. Implica la logística de alimentación, de hospedajes y eso es lo que va, para mí, suponer el desastre. Empezamos por un hotelito con su restaurante. Vamos a ampliar el aparcamiento. Cada vez viene más gente y ya no son 140.000, ahora son 300.000. Y eso al final origina lo que estamos viendo continuamente y hemos visto cuando hemos ido por ahí de vacaciones. Hemos visto sitios que dices. "¿Qué es esto? ¡Qué desastre! ¡Qué monstruo!" Y yo no quiero que Urdaibai sea eso. Tiene que ser la Reserva de la Biosfera con su Bird Center para observar las aves y sea un espacio lúdico para mucha gente. Pues con las canoas y disfrutando del medio ambiente, que es lo único que tenemos aquí. No queda más. El estuario del río en Muskiz es un ejemplo. Aquello era acojonante. Era precioso. Era como Urdaibai. Hicieron la refinería y “a tomar por culo”. Eso no va a ocurrir lo mismo en Urdaibai, pero que se va a alterar y se va a alterar seguro.
Para mí el futuro de Urdaibai es a pequeña escala, así como el de Euskal Herria a gran escala, no pasa por el turismo. El turismo es destructor, ya lo vemos todos los días. Vemos cómo está Donosti, cómo está en otros sitios, cómo ha quedado Lekeitio. Es un desastre. El futuro de toda la zona y del país pasa por una industria sostenible. Y por un sector primario importante, pero no por el sector turístico. El sector turístico lo va a destrozar todo. Y digo en términos generales, al menos que haya una industria limpia, potente, muy técnica. Lo de Urdaibai es que va a ser un pelotazo para cuatro personas. Eso está clarísimo. Son los propietarios de los terrenos que no vamos a dar nombres y apellidos y cuatro políticos.
El impacto mayor, por lo tanto, es el del turismo.
Está clarísimo. La vía verde. Esa que se anuncia entre Gernika y Murueta. ¿Eso qué significa? ¿Que la gente va a ir desde Gernika hasta Murueta andando? ¿Gente mayor, jubilada, con niños? Son tres o cuatro kilómetros. O sea, otra mentira.
¿Qué cosas crees que no se están haciendo, que se deberían hacer?
Mejorar el sistema de vida y la calidad de vida de Urdaibai por otros medios que no sea el turístico. Eso, yo no soy un experto, no soy un profesional, no puedo planificar esas cosas. Habrá gente que sí lo puede hacer capacitada. Pues hay que trabajar. Hace años también hubo un proyecto de hacer un puerto deportivo en Mundaka. Se rechazó, fue una locura de alguien, pero yo creo que eso también está en algún cajón, ahí escondido, pero está presente. ¿Puede ser una posibilidad o una elucubración mía pero una vez que se haya hecho todo ya, qué más? Que vengan por tierra, mar y aire ya los turistas.
¿Quieres comentar algo más?
De hecho hay un problema ya con las viviendas turísticas, que eso deriva en la gente del pueblo, la gente joven, que no tienen acceso ya a unos alquileres razonables. Eso también es una derivada del turismo. Es muy importante, claro, porque después sacrificas el municipio. Resumiendo, es que la política de turismo que está planteada en este país desde hace años, es un gran error, y eso tendrá consecuencias negativas para todo Euskal Herria. Eso es lo que veo.