¿Cómo crees que ha cambiado la comarca los últimos años?
Económicamente creo que no ha cambiado mucho porque es una comarca que ha estado bastante abandonada por parte de las instituciones. Ha sido una zona que la han tenido como una especie de lugar para enseñar, de lugar protegido y tal, pero luego lo que es realmente políticas de desarrollo reales, de aprovechamiento de las oportunidades, pues no ha habido. Y luego, ha habido institucionalmente una especie de boicot a la normativa de protección de Urdaibai. Porque cuando se aprobó se aprobó por unanimidad en el Parlamento vasco, pero yo creo que los políticos no se daban cuenta de lo que estaban haciendo. Algunos por lo menos. Lo protegieron, además, por ley. A mí me parece fenómeno que se hiciera, pero creían que tener un espacio protegido era gratis, pero hay que desarrollar ese espacio, dotarle de servicios, dotarle de iniciativas y yo he estado en la ría de Urdaibai y realmente no he visto en los últimos 40 años iniciativas reales de desarrollo a nivel institucional. Lo que he visto ha sido decadencia continua en todos los sectores. Sector industrial desmontado, sector primario muerto. Lo único por lo que se ha apostado, porque no quedaba otra, ha sido el turismo, pero sin planificación ni directrices de cómo hacerlo. No han respetado los planes que se habían aprobado desde el Patronato. Planes de desarrollo ha habido. Lo curioso es que ha habido PADAS y se quedó ahí. Se hizo el plan, se aprobó decreto y se metió en un cajón.
Es decir, propuestas había y en esas sí que participó mucha gente, creo que 250 personas participaron en ese proceso, pero no están acostumbrados a que las decisiones de la comarca se tomen en común. Y así ha sido. Todas las propuestas que se han hecho han sido modificaciones en contra de la protección. Las modificaciones del PRUJ han ido en contra de lo que ha sido la protección, reduciendo los espacios de protección. El tema urbanístico en cuanto ha caído en manos de las diputaciones, de los ayuntamientos ya no ha habido ningún problema. Ellos hacen y deshacen. Y actualmente la comarca es una comarca de servicios, pero no más. La pesca también está en total decadencia desde hace ya 40 años. Es una zona abandonada para mí. No hay modelos de desarrollo que además estén vinculados a la Reserva de la Biosfera, que hubiera sido una oportunidad muy importante. No apostaron por ella. Urdaibai es como un parque para ellos. Me refiero para la gente que ha estado gobernando, porque al final siempre han sido los mismos. Entonces yo veo fundamentalmente una paralización. Estamos como estábamos antes. La mayor parte de la gente de la comarca tiene que trabajar fuera de aquí. Si vas a las 06:30 0 7:00 a trabajar fuera, ves que hay caravanas y los que vienen son pocos. Y eso te dice claramente que no puede ser.
Hoy en día, ¿qué retos tiene la comarca?
Pues tiene retos de desarrollo, por ejemplo, de un modelo forestal diferente. Retos que ya se planteaban en el PADAS que están todavía vigentes. Aprovechar las oportunidades que da una Reserva de la Biosfera da para el desarrollo sostenible. Por ejemplo, siempre se ha comentado desde los grupos ecologistas y no desde grupos ecologistas de la universidad también, hacer en Guernica, en la zona de los polígonos donde ahora quieren hacer una parte del Guggenheim, un parque tecnológico relacionado con tecnologías de medio ambiente como se ha hecho en Dinamarca, y como se hace en todos los sitios. Aquí nunca tuvieron interés, porque yo creo que nunca han querido tocar la Vega, porque la Vega para ellos es un espacio urbanístico, no un espacio de desarrollo socioeconómico. La vía del tren delimita la zona urbana de la zona no urbana y siempre han tenido la intención como de decir que eso es como el doble de Guernica. No han querido hacer nada ahí. Y siguen ahí. Y yo creo que el Guggenheim es un caballo de Troya va para cambiar la normativa que ya se ha cambiado en esa zona. El otro caballo de Troya sería Murueta, que es la ley de Urdaibai. Son dos leyes diferentes. Pero yo creo que hay cosas que se pueden hacer mejor.
Podrían ponerse incentivos para el sector primario, por ejemplo. Siempre ha sido una comarca agrícola. Vas al mercado y ya dentro de diez años no va a haber más que cuatro personas allí vendiendo cosas. No hay, renovación, porque las apuestas realmente por renovar el sistema agrario en Urdaibai son cosméticas, no son reales. Se apuesta mucho más por el urbanismo de las áreas rurales para que sean dobles residencias, más que para que la gente de la zona pueda desarrollar actividades económicas dentro. Y así va. Y además encaja un poco con una frase que dijo este Unai Rementeria, que fue diputado general y que fue alcalde de Mundaka y que dijo que la materia prima de la comarca era el suelo urbanizable. Entonces, si lo dice gente que tiene esa jerarquía, pues te está diciendo claramente que la apuesta de ellos es vender el suelo y luego ya ver lo que hacemos. Y es verdad, lo han cumplido. En eso no se puede decir que hayan mentido. Él ya lo cumplió. En su, Mundaka no se puede construir más porque ya está todo construido y no para la gente del pueblo precisamente.
Sí vas a Lea-Artibai, por ejemplo, siempre se habla de que las comunicaciones son un lastre para la comarca. Tú vas a Lea-Artibai, que es una comarca que tiene peores comunicaciones que las nuestras. Tiene Tramakua, que es otro puerto más largo todavía que el nuestro y está lleno de polígonos industriales del Grupo Mondragón, herramienta... Cada pueblo pequeño tiene su polígono industrial. Tú vienes a Urdaibai y no hay absolutamente nada. ¿Es que son más listos? ¿O piensan que para fijar a la población allí tiene que haber unan industria? Y no soy de los que dicen, que tiene que haber industria en todos los lados, pero que tiene que haber algo. Todos los sectores tienen que estar representados y aquí, quitando el del turismo, los demás están todos en decadencia: la pesca, la agricultura, la ganadería. Si vas a Gipuzkoa a cualquier pueblo que tiene unas comunicaciones que son todos pueblos metidos en cárcavas y vas a Elgoibar, está todo en el Polígono. ¿Y aquí no hay nadie que se le haya ocurrido hacer es? Querían hacer una zona rural, pero no decían quién iba a venir. Eso sí, carreteras sí. Todo me lleva a pensar lo mismo. Además, como he estado en el Patronato trabajando muchos años, he visto cosas ahí que reafirman lo que pienso. No tiene ninguna intención de moverse.
¿Qué oportunidades o iniciativas interesantes ves en la comarca?
La industria no puede ser industria pesada aquí, pues se puede apostar por parques tecnológicos de ramas medioambientales como se hizo en Zamudio. ¿Aquí por qué no se puede hacer? Vas a Markina y tienes unos polígonos tecnológicos que dices está en el culo del mundo. ¿Aquí por qué no se puede hacer? Y es una cuestión claramente de voluntad política, porque los polígonos no solamente los potencian los ayuntamientos. Eso también debe tener el apoyo de Diputación y Gobierno Vasco, porque son inversiones fuertes y aquí, sin embargo, no ocurre.
¿Cómo se deberían tomar las decisiones y cómo se están tomando en la comarca?
Aquí se toman las decisiones desde arriba. Te convocan a veces, y el PADAS fue una convocatoria que se hizo con mucha gente, pero luego realmente es una manera también de justificar que te han dejado participar, pero luego las decisiones que se toman entre todos no existen. No se ponen en práctica y es una pérdida de de muchas cosas. Primero de inteligencia, porque si tú tienes a 200 personas opinando, 200 personas que saben un poco de lo que hablan y no les tienes en cuenta, estás perdiendo un capital intelectual de la ostia para luego no hacer nada. Igual es que realmente lo que quieres es dar la sensación de que quieres hacer algo, pero luego no haces nada. Y esa es la sensación que tiene la gente aquí. Es una sensación de que la comarca está olvidada. En ese sentido, no se tiene en cuenta las opiniones de la gente ni de los sectores. Aquí es muy piramidal, muy piramidal. De hecho, relacionado con el tema del Guggenheim, el Guggenheim es un poco una iniciativa de Bilbao. El Guggenheim de Bilbao necesita una ampliación y lo tienen que hacer aquí. Pero es que no es un proyecto que surja ni de la comarca, ni de los sectores sociales de aquí. Es una cosa que nos viene que nos ha caído a nosotros porque les hace falta a los de Bilbao que haya un museo aquí, un museo o algo parecido. Entonces, más que nada, siempre vemos todo así. En Bilbao también el turismo se está desarrollando y hace falta que la gente se quede más días. Vamos a desarrollar el turismo también en Urdaibai para que tengan un sitio donde dormir. Pero es todo por necesidades de la metrópoli. Pero lo que es el sector económico que mueve Urdaibai, ese está sin moverse.
¿Quieres compartir algo más o profundizar en algun tema?
Yo más que nada con el tema del museo, yo creo que que bueno lo que comenté antes, yo creo que son dos caballos de Troya. Tratan de incidir sobre sobre la ley de Urdaibai. Porque no es lógico, y cada vez hay más gente que lo dice, que lo único que quieren hacer el museo en el lugar más protegido de la comunidad Autónoma del País Vasco. Eso es un ariete. Lo vamos a hacer aquí. ¿Por qué? Porque es el corazón de Urdaibai. Si lo hacemos aquí, Urdaibai ya empieza a no ser Urdaibai. Y ya podemos desarrollar todo lo que siempre han querido, que es el tema urbanístico del entorno. En Gernika lo mismo. La normativa de Urdaibai no tiene influencia porque es área industrial y eso depende del Ayuntamiento. Pero ya están empezando. Cuando han tirado Dalia, ya han cambiado la normativa. Entonces es como una balsa de aceite, Lo irán ampliando y creo que el museo y por ser el museo y por otras cosas que podrían hacer relacionadas con él, va a cambiar totalmente la comarca, en el sentido de que ya va a ser una comarca no de servicios, sino incluso para la propia gente de la zona.
Y la gente que conozco que está buscando pisos está teniendo que ir de Urdaibai. La mayor parte se va a Bilbao y eso que Bilbao no es barato, pero a la periferia de Bilbao, porque aquí es imposible comprar pisos cuando sí hacen el museo va a ser mucho peor. El tema del comercio, por ejemplo, eso ya se ha visto en Bilbao, se ha visto en otros sitios, Este tipo de macroproyectos lo que hacen es cambiar la fisionomía de la comarca y además, los servicios que se ofrecen o los comercios se orientan precisamente a satisfacer las necesidades del turista, no del que vive aquí. Es para que el turista se acabe sintiendo como si estuviera en casa, pero el que está en casa se acabe sintiendo como si no estuviera en su casa y eso ya la gente lo está notando. Y uno de los elementos que ha contado en contra, que para mí es radical, en contra del tema del museo, es que la gente incluso que estaba a favor y yo conozco a algunos que decían que les parecía muy bien, ahora están totalmente en contra porque han visto lo que es el turismo masivo. como desde el primer proyecto que se hizo en su carreta hasta este. Han pasado 15 años. En 15 años el turismo ya lo ha visto la gente, la gente antes pensaba que no iba a venir aquí gente.
Ahora la gente de Guernica dice que estamos hasta aquí. Sin museo, con museo no quiero ni pensarlo. Y luego la influencia que va a tener en la marisma, es radical. Es muy curioso porque no se dejaba abrir ni una ventana en un caserío, porque la normativa no dejaba en esa zona. Y ahora te pueden hacer un edificio de tres o cuatro hectáreas allí porque alguien se la ha puesto en la nariz, que tienen que hacerlo.
Es un precedente, porque si el museo se plantea en una zona tan protegida, ¿qué zona va a estar libre de que este tipo de cosas se puedan hacer? Urdaibai está protegida por ley. Es una cosa única en Europa. Hay muy pocos espacios de Europa y del mundo que estén protegidos por ley, que es lo más alto que existe. Eso es algo que se les pasaría en su momento cuando lo protegieron.
Es un precedente. Entonces, cualquier zona, no solo ya de aquí, sino de toda Europa, digan, ¿si lo hicieron allí, por qué no lo vamos a hacer nosotros? Luego siempre pueden vender que han venido visitantes espero. Yo la verdad no lo veo. Para mí es un sinsentido. Yo creo que para ellos también. Se da una coyuntura. La Consejería de Ambiente nunca ha estado en manos del PNV. Siempre había un contrapeso. El Gobierno era del PNV y EA, o PSOE o lo que sea. Y la cartera siempre de Consejería de Medio Ambiente. Como eran consejerías con poco poder económico, pasaban siempre al socio menor. Entonces eso era un contrapeso. Los de EA no tenían la misma posición con Urdaibai que los del PNV. Eran más conservacionistas los que tenían la Consejería. Pero eso ha cambiado en los últimos cuatro años. Ha pasado al PNV y ahora ya no tienen contrapeso. Cuando cogió la Consejería el PNV, ya muchos pensamos bueno, ahora ya no tienen con quién pelearse. Y se ve precisamente en Urdaibai.
Urdaibai no tiene presencia, el patronato no tiene presencia. Yo he trabajado allí. No sé a qué se dedica ahora. El Patronato no tiene presencia en el territorio ni existen actividades relacionadas con la reserva, ni noticias prácticamente de Urdaibai que no sean Guggenheim. No hay iniciativas del Patronato. Es como un ente que está ahí, prácticamente inoperativo y es fundamental que exista una entidad que desarrolle la normativa y que desarrolle también iniciativas de conservación, de conocimiento, de participación y mil cosas. Yo llevo años que no sé exactamente cuál es la labor del Patronato.
Me llama la atención que nunca se habla de los contenidos del museo. Hay que hacer un museo porque hay que hacer un edificio emblemático y tal. Nadie habla del contenido. Es como hacer una Torre Eiffel. Y claramente te están hablando de que lo que quieren es desarrollo turístico.
La concepción que ha tenido y la pelea que tenían PNV-EA o PNV-PSOE dentro del mismo gobierno, cuando la Consejería de Medio Ambiente era su empresa. El PNV siempre pensaba que esto era una zona salvaje, inexplorada. Esto es como el oeste, hay que domarlo. Y los que estaban en el otro lado no sé si eran más conservacionistas o simplemente por defender su parcela de poder. Decían que esto tenía que ser una zona de desarrollo sostenible y tal. Eso ya no existe. Ahora todo va adelante y al no haber participación hay un choque que va a más. Esperemos que se tomen las decisiones adecuadas porque si no esta comarca no la va a reconocer ni Dios.